Afirman que prisas provocan pifias del gobierno de AMLO

Ciudad de México, 27/04/24 (Más / IA).- En la carrera contra el tiempo para concluir su administración, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, enfrenta críticas por la apresurada ejecución de proyectos legislativos y de infraestructura, que lo llevan a cometer pifias.

Según un análisis que publica este sábado el diario estadounidense Chicago Tribune, expertos señalan descuidos y errores en medio de la urgencia por finalizar las promesas de campaña antes de septiembre.

Este mes, un incidente en el Congreso evidenció la precipitación: legisladores de Morena presentaron por error un proyecto de ley incorrecto sobre la reforma de pensiones, lo que obligó a posponer la votación.

La confusión se extiende a los proyectos ferroviarios, con fallos de construcción que incluyen grúas colisionando contra puentes y pilotes hundiéndose en áreas naturales protegidas.

Con la elección presidencial del 2 de junio en el horizonte, López Obrador busca asegurar la implementación de sus políticas para que el próximo gobierno no pueda revertirlas fácilmente, según el analista político José Antonio Crespo.

La reforma de pensiones se ha convertido en foco de controversia, al proponer la confiscación de fondos no reclamados a los 70 años, destinándolos a un fondo común para pensiones mínimas.

Aunque el presidente asegura que los fondos estarían disponibles para su devolución, el proyecto presentado erróneamente eliminaba protecciones clave, aumentando el riesgo de embargo incluso para empleados activos.

El proceso burocrático para retirar pensiones en México, ya restrictivo, ha generado escepticismo sobre la facilidad prometida para recuperar los fondos.

El senador opositor Rubén Moreira critica la medida como un saqueo a las cuentas personales y una solución ineficaz al problema de pensiones.

López Obrador, conocido por su rechazo a los programas de beneficios privados, aboga por sistemas de bienestar gestionados por el Estado, en contraposición al “individualismo” y “aspiracionismo”.

Desde 1997, el sistema de pensiones mexicano adoptó un modelo de contribuciones de trabajadores y empleadores a cuentas de inversión individuales para la jubilación. Este cambio, sin embargo, no ha resuelto la insuficiencia de fondos, y la actual propuesta legislativa ha intensificado el debate sobre el futuro de la seguridad social en México.