Pekín, 17/06/24 (Más / IA).- Un incidente marítimo entre China y Filipinas generó tensión en el Mar del Sur de China, donde ambos países han reclamado territorios en disputa.
Según la versión china, una nave filipina se acercó de forma peligrosa y poco profesional a los barcos chinos que navegaban con normalidad, lo que llevó a un choque.
Sin embargo, la Marina filipina desmintió esta versión, afirmando que no había más problema que la tozuda presencia china en las aguas de su zona de exclusión económica.
El choque tuvo lugar en los aledaños del barco de guerra oxidado y desvencijado Sierra Madre, que Manila plantó hace tres décadas sobre un banco de arena en las islas Spratly.
El barco acoge a docenas de militares en activo que lidian contra el sol tropical y los mosquitos.
Atacarlo sería considerado un acto de guerra y a Filipinas y Estados Unidos les une desde 1951 un acuerdo de defensa militar mutua que la segunda se preocupa en describir como vigente y férreo.
La tensión entre los dos países ha aumentado en los últimos años debido a la creciente presencia china en las aguas del Mar del Sur de China.
La ley china que entró en vigor el fin de semana faculta a su Guardia Costera a abordar cualquier barco extranjero en sus aguas territoriales o a mantener detenida a su tripulación durante dos meses sin juicio.
Filipinas, Vietnam y Taiwán advirtieron que ignorarán la legislación china, lo que convierte en vulnerables a los pescadores que faenan en aguas que Pekín reclama para sí.
La reunión del G-7 recientemente concluida criticó el creciente y «peligroso» uso chino de su Guardia Costera y sus milicias marítimas, en especial sus maniobras arriesgadas o sus cañones de agua.
Filipinas y China han gestionado sus reclamaciones territoriales con desigual fragor a lo largo de los años.